Publisher's Synopsis
Creo que la palabra de Dios es tan simple de entender como álgebra o fracciones. Tan simple como hornear un pastel o hablar un idioma. Caminar o andar en bicicleta. Tan simple como conducir un cambio de palanca o hacer cualquier otra cosa que realmente quieras hacer o aprender. Le pones tu mente en ello o lo buscas y Él promete que será encontrado. La verdad es que Él realmente te está buscando.